La NASA descubrió a Kepler-1649c, un planeta muy similar a la tierra y posiblemente habitable.
El universo nunca deja de sorprendernos, y para muestra de ello el descubrimiento que hizo la NASA sobre un nuevo planeta que es muy parecido a la tierra, y lo mejor, es que probablemente sea muy habitable.
Kepler-1649c es el nombre de este exoplaneta, y de acuerdo con los estudios realizados, cuenta con la temperatura y tamaño apto para poder ser habitado por humanos, y para que la vida se pueda desarrollar.
Su tamaño es 1,06 veces el del planeta tierra, y por si fuera poco, órbita alrededor de su propia estrella polar, por lo que de ella obtiene el 75% de la energía estelas que nosotros recibimos del Sol, por lo que la temperatura es similar a la de la tierra, aproximadamente de -39 grados Celsius.
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Cabe mencionar que todo está basado en los datos obtenidos sobre la radiación de su estrella polar, y aún no se considera otra información como la reflectividad o efectos atmosféricos, lo cual podría arrojar datos más exactos.
“Este intrigante y distante mundo nos da aún más esperanzas de que una segunda tierra existe entre las estrellas, esperando ser encontrada”, dijo al respecto el administrador asociado de la Dirección de Misión Científica de la NASA, Thomas Zurbuchen.
“Entre los planetas que hemos encontrado, este es el más ilusionante”, añade en el comunicado lanzado otro especialista.
Toda la información anterior fue recopilada por el telescopio espacial Kepler, el cual la NASA retiró desde el 2018, y aún restan múltiples cuestiones a evaluar para determinar la factibilidad de que Kepler-1649c sea habitable.
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